Buenas Secret Adict@s,
Tenemos que verle el lado positivo a lo de estar en casa, tenemos tiempo de cuidarnos más. Todo ese tiempo que no teníamos, ahora lo estamos aprovechando pero bien la verdad, por lo menos en mi caso. No tenía tiempo de escribir, con lo que me gusta a mí y ahora lo estoy haciendo y es un gustazo, me siento tan bien cuando lo hago.
Hay una parte de mi cuerpo que siempre me ha preocupado y desde que soy madre más y eso AQUARELA PELUQUEROS lo sabe y es mi cabello. Como lo he pasado tan mal, bueno, lo pasé mal tras dar a luz vamos, porque voy a ver si recupero esas fotos de como tenía el pelo, bueno un horror vamos. Las que han sido madres me entenderán a al perfección. Pero mal, mal, mal, no os podéis imaginar.
Sabéis que siempre voy a Aquerela Peluqueros y que gracias a ellos y a Valeria, su creadora ahora tengo el cabello bajo control. El post de hoy va en saber diferenciar tres cosas: la mascarilla, el acondicionador y la crema de peinar. Puede parecer muy lógico, pero no todo el mundo sabe diferenciarlos. Seguro que os ponéis a pensar y decís que la mascarilla y el acondicionador hacen la misma función y no es así. De eso se trata el post de hoy.
Aquarela Peluqueros y especialmente Valeria, experta en recuperación capilar nos traen las claves para usar correctamente cada producto y que saquemos el mayor partido posible a ellos.
Siempre lo digo, antes de lavar el cabello hay que cepillarlo, de esta manera favorecemos la circulación y oxigenamos la zona, potenciando así los activos de los productos. A continuación mojamos el cabello y aplicamos el champú solo en la zona del cuero cabelludo. ¿Después, aplicamos mascarilla o acondicionador? ¿Crema de peinar también?
En cuanto al acondicionador, el champú abre la cutícula para limpiar y el acondicionador la sella tras el lavado y mantiene la hidratación. Estos dos productos van siempre de la mano y este es el orden correcto a la hora de aplicarlos porque los acondicionadores protegen la hebra para que no se vuelva porosa y evitar usarlos implica dañar el pelo a largo plazo. Es importante destacar que las mascarillas no tienen esta función.
Respecto a la mascarilla, no debe usarse tan sólo unos minutos bajo la ducha ni tampoco es un finalizador del lavado. Las mascarillas tienen la principal función de reparar, nutrir o hidratar el pelo. Por eso es fundamental identificar si nuestra melena necesita una mascarilla hidratante, nutritiva o reparadora y así proporcionarle el ‘alimento’ adecuado. De lo contrario podemos provocar un exceso de grasa, opacidad, saturación en la hebra, entre otros desastres. Una vez a la semana aplica una mascarilla, envuelve el cabello en una toalla y deja reposar 30 minutos para que penetren bien todos los nutrientes. Las únicas que pueden aplicarse cada semana son las hidratantes porque aportan agua. La nutritivas aportan lípidos y se recomiendan cada quince días.
Y la crema de peinar, su principal cometido es proteger el cabello de las agresiones externas como la contaminación o los rayos ultravioletas. Además, sirve también para disciplinar el cabello y mantenerlo desenredado todo el día. La manera correcta de usarla es retirar la humedad del cabello con una toalla y aplicar una nuez de crema de peinar en las puntas porque el pelo mojado es muy frágil y este producto ayuda evitar su rotura. Además, es un producto especialmente interesante para los cabellos rizados u ondulados porque aporta suavidad y sobre todo hidratación al rizo, que tanto
necesita. Lo ideal es que nuestra crema de peinar contenga protector térmico pero si no es así, y se quiere usar aparatos de calor, aplica previamente un spray de protección y cepilla siempre con un peine de púas anchas. Es mejor dejarlo secar al aire libre :).
Espero que haya sido de gran ayuda conocer un poco más la diferencia y que hagáis un buen uso de los productos.
Muchas gracias por los comentarios :).
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