DELICIA GASTRONÓMICA: PIÚ DI PRIMA

Buenas Secret Adict@s,

Madrid tiene rincones preciosos por los que pasear, por los que visitar... Pero también Madrid enamora por su cocina, tan amplia la variedad que tenemos pero muy pocas que verdaderamente digamos que de verdad merece la pena.

Si os hablo de cocina italiana me diréis lo de siempre, que en Madrid no hay restaurantes italianos de verdad., sólo me decís pizza y pasta y ya. Aquí no os doy la razón porque no habéis estado en uno exquisito, PIÚ DI PRIMA. Éste sí que es un verdadero restaurante italiano y es que el otro día tuve el placer de degustar sus platos y me conquistó. No he probado nunca nada igual, de verdad.

También me conquistó por la decoración, porque nada más entrar sientes esos aires italianos, el ambiente y es que desde un primer momento se ha buscado que el espacio conjugaran en armonía la tradición y lo contemporáneo, que fuera un espacio ameno, cálido, atemporal, cosmopolita y confortable y por supuesto, la guinda del pastel lo marca la estampa de la espectacular Sophia Loren que está situada en el hall, un diseño exclusivo para Piú di Prima.

Cuenta con una bodega con más de 40 referencias procedentes de regiones italianas, pero también de mercado nacional, una carta de cocktails para ir abriendo apetito a modo de aperitivo o simplemente el placer de tomar una copa con amigos o familiares mientas se degustan los platos de Stefano Franzin.

Detrás está el chef veneciano muy reconocido, Stefano Franzin, socio de este gran proyecto gastronómico y el cual se reconoce como un auténtico restaurante italiano clásico de alta cocina en la ciudad. Cuenta con una larga trayectoria, donde ha pasado por Londres, Niza, Múnich, Uruguay y el destino le trajo hasta Madrid, donde se ha instalado definitivamente y no hay mejor persona para estar al cargo de Piú di Prima. En mi opinión, no hay muchos cocineros que se involucren tanto en la cocina como él y os lo aseguro porque se nota en cada plato.

Conocí a Teresa Santillana-directora de Piú di Prima, donde nos propuso unas sugerencias de platos de lo más irresistibles, donde empezamos por los aperitivos y una ensalada de foie para ir abriendo apetito que estaba delicioso y como es ligera pues entra con mucho gusto. Después nos trajeron el vitello tonnato Piú di Prima, con una salsa ligera de atún y alcaparras.

A continuación los imprescindibles de la casa, la pasta, pero no una pasta cualquiera, ya que ellos elaboran la pasta al momento de ser consumida, por lo que es artesanal y se nota cuando le das el bocado y este plato que nos pusieron fue una receta del siglo XV que era la favorita de los nobles italianos, especialmente por su exquisitez: raviolone con parmesano, espinacas, huevo de corral y trufa rallada directamente en la mesa. De los platos que mejor he probado, quería hasta repetir, me dejó un sabor de boca espectacular y como no podía faltar, el siguiente plato fue risotto a la tinta de sepia con carabinero, elaborado con arroz italiano, que también estaba para repetir plato y es que el risotto de Stefano Franzin ha sido reconocido como uno de los cinco mejores risottos del mundo entre un total de 101 restaurantes. De verdad, tenéis que probarlo, un placer para todos los gustos.

Y como siempre hay hueco para el postre, nos trajeron el tiramisú clásico veneciano con gotas de chocolate y amaretto y el refrescante semifrío de mojito en tres texturas, una pasada estos postres.

Sin lugar a dudgas, un restaurante en Madrid que lo tiene todo, buena carta, buen servicio, unos platos de lo más gustosos, un ambiente distinguido y lo mejor, donde está situado, en Paseo Pintor Rosales, 30, Madrid, al que no podéis dejar pasar esta experiencia gastronómica.

Muchas gracias por los comentarios :).